El Consejo rumano de la competencia impone una multa de 3,35 millones de lei a OKI Europe.
OKI Europe Limited, con sede en Egham, Surrey, Reino Unido, ha sido multada con 3,35 millones de lei (672.000 euros / 710.000 dólares) por el Consejo de Competencia rumano por participar en prácticas anticompetitivas entre octubre de 2015 y marzo de 2020. La investigación reveló que OKI Europe, en colaboración con su distribuidor rumano General Systems S.R.L., limitó las exportaciones y fijó precios de reventa para controlar la dinámica del mercado y maximizar las ganancias.
General Systems S.R.L., un destacado distribuidor de equipos de oficina y soluciones de TI en Rumania, jugó un papel crucial en la ejecución de la estrategia. Junto con OKI Europe, establecen precios de reventa diferenciados para impresoras y dispositivos multifuncionales, ajustándolos por región para garantizar mayores ganancias. Al restringir las exportaciones, aseguraron que estos precios se mantuvieran en todo el mercado nacional.
A pesar de su participación en el esquema de fijación de precios, General Systems S.R.L. recibió inmunidad en virtud del programa de clemencia rumano, que permite a las empresas evitar multas si revelan prácticas anticompetitivas a las autoridades y cooperan plenamente durante las investigaciones.
La ley de competencia rumana, en particular la Ley núm. 21/1996, prohíbe acuerdos o prácticas coordinadas que distorsionen la competencia en el mercado. Las empresas que violen estas normas pueden enfrentarse a multas de hasta el 10% de su facturación anual. La decisión refuerza el enfoque del Consejo Rumano de Competencia en promover la transparencia y los mercados competitivos.